¿En qué consiste el mantenimiento de los implantes dentales?
Los implantes dentales necesitan de un correcto mantenimiento. Esta idea no está interiorizada todavía por muchos pacientes que sí son conscientes, en cambio, de que deben pasar periódicamente (al menos una vez al año) por el dentista para una limpieza dental y un chequeo general.
Un correcto mantenimiento de los implantes dentales va a permitir detectar a tiempo problemas bucales como alternación en las encías o incluso afecciones más graves. En estas visitas periódicas al dentista lo correcto es realizar una ortopanomografía de control en la que se analicen los niveles de higiene, si existe placa bacteriana, cuál es el grado de inflamación de la encía y qué estado presentan los tejidos blandos alrededor del implante dental.
No obstante, además de la visita periódica al dentista, el paciente también puede mejorar el mantenimiento de los implantes con buenas técnicas de higiene oral para evitar la aparición de placa bacteriana o reducir su presencia.
¿Cómo cuidar el estado de los implantes dentales?
El mantenimiento de los implantes dentales consiste, básicamente, en llevar a cabo una buena higiene bucodental con cepillado de dientes varias veces al día, pasar el hilo dental para retirar los restos de comida entre dientes y finalizar la rutina con enjuague bucal, que ofrece sensación de limpieza total. Los cepillos eléctricos, si son de calidad, son bienvenidos, así como los irrigadores bucales.
En caso de sentir alguna molestia o notar que el implante dental se afloja, lo recomendable es visitar de inmediato al dentista, pues si la situación empeora puede acabar en infección ósea a causa de la corrosión que genera el implante en el hueso.
Por último, toda esta rutina debe acompañarse de un seguimiento continuo por parte de una clínica de odontología, donde advertirán sobre posibles situaciones que se hayan ido agravando.