Causas de los cambios de coloración en los dientes

Los cambios de coloración en los dientes aparecen de manera natural, pero también se pueden producir por factores externos como los malos hábitos en la ingesta de alimentos y bebidas, además de una higiene bucodental incorrecta.

Muchas personas ya nacen con dientes en tonos más amarillentos que otras. Además, la edad también incide en los cambios de coloración de los dientes, a lo que se añaden manchas superficiales y pigmentaciones causadas por factores intrínsecos y extrínsecos.

Las causas intrínsecas

Las coloraciones muy amarillentas y con tonos grisáceos son propias del proceso natural del envejecimiento. A menudo, si ocurren golpes en las piezas dentales que tienen como consecuencia la muerte del nervio, el resultado es un cambio de coloración hacia tonalidades más grisáceas o similares al café.

La infancia es un proceso clave para evitar los cambios de coloración. Del nacimiento a los seis años, cuando ocurre la formación de los dientes, se pueden oscurecer debido a una ingesta excesiva de fluoruro. Otra causa posible son los tratamientos con dosis elevadas de tetraclinina en esta misma etapa.

Motivos externos

Las causas extrínsecas incluyen todos los procesos que provocan cambios en la coloración de los dientes. Estos son principalmente el consumo de alimentos y bebidas que van generando manchas en los dientes.

Las bebidas a evitar son el vino tinto, el café, el té, las bebidas energéticas y las gaseosas. Su efecto sobre el esmalte dental es la decoloración, de ahí que haya que mostrarse cauto con su ingesta. A su vez, el tabaco también genera los mismos efectos y manchas desagradables en los dientes, y eso por no hablar de sus otros efectos perniciosos.

En cuanto a los alimentos, existen algunos que incluyen colorantes artificiales o bien que por su propia naturaleza incluyen muchos pigmentos. Ese es el caso de las cerezas o las zanahorias. Con los cítricos hay que mostrar la misma cautela, así como con las golosinas que incorporan alta cantidad de colorantes.

En todos estos casos, la mejor fórmula para evitar los cambios de coloración en los dientes es consultar con un profesional odontólogo, que ofrecerá consejos y tratamientos óptimos.